Estimados amigos, les envío información sobre las novedades editoriales de Ediciones UDP
EL CEÑO RADIANTE
Vida y poesía de Gerard Manley Hopkins
NEIL DAVIDSON
NEIL DAVIDSON
En
1875, el poeta y jesuita inglés Gerard Manley Hopkins estrenó su
prosodia revolucionaria, el sprung rhythm, en una obra que aúna la
sofisticación rítmica de un Bartók o un Stravinski con la urgencia del
rap: “El naufragio del Deutschland”. Repudiado por sus contemporáneos,
Hopkins moriría inédito y desconocido, pero se reconocería en el siglo
XX como el fundador de un modernismo alternativo e infinitamente vital, y
sería, como pronosticó en 1932 el crítico F. R. Leavis, “para nuestro
tiempo y el futuro, el único poeta influyente de la época victoriana”.
Mezclando
biografía con traducciones de los diarios y cartas de Hopkins,
interpretaciones de sus poemas y evocaciones del contexto victoriano, El
ceño radiante es una completa introducción a uno de los personajes más
extraordinarios de su siglo en Inglaterra.
El
libro concluye con una antología de poemas donde, por primera vez en
castellano, se aprecia la audacia rítmica y lingüística de una
producción que va desde “El cernícalo” hasta el asombroso “De que la
naturaleza es un fuego heraclitano y del consuelo de la Resurrección”,
poema que, en palabras de Hans Urs von Balthasar, “arroja al basurero
todo el mundo cultivado de belleza de la época victoriana”.
“Si
se hubiera sabido de él, como de Rimbaud en Francia, la poesía de
Hopkins, con su fe religiosa, sus experimentos en versificación, su
‘noche oscura del alma’, habría reducido a la insignificancia inmediata a
todos sus contemporáneos victorianos”.
Cyril Connolly
NEIL DAVIDSON nació
en 1966 en Oxford, Inglaterra, y desde el año 2000 vive en Santiago de
Chile, donde trabaja como columnista y traductor. Ha colaborado en
diversos diarios y revistas chilenos, y una recopilación de sus escritos
fue publicada en 2010 bajo el título The Chilean Way: crónicas 2000-2010.
MARTÍN FIERRO
JOSÉ HERNÁNDEZ
JOSÉ HERNÁNDEZ
Culminación de la poesía gauchesca, el Martín Fierro, por diversos motivos, entre ellos su calidad impar, ha llegado a ser el clásico por excelencia de la literatura argentina.
César Aira
Para
unos, Martín Fierro es un hombre justo; para otros un malvado o, como
dijo festivamente Macedonio Fernández, un siciliano vengativo; cada una
de esas opiniones contrarias es del todo sincera y parece evidente a
quien la formula. Esta incertidumbre final es uno de los rasgos de las
criaturas más perfectas del arte, porque lo es también de la realidad.
Jorge Luis Borges
Cuando leí el Martín Fierro me convencí –como estoy convencido ahora– de que es el poema más grande de nuestro idioma.
Nicanor Parra
JOSÉ HERNÁNDEZ nació
en la provincia de Buenos Aires, Argentina, el 10 de noviembre de 1834.
Fue un militar, un activo político y un periodista muy relevante en la
historia de su país –escribió abundantemente sobre política en la
prensa, siendo la defensa de los gauchos uno de sus temas recurrentes, y
en 1869 fundó el diario El Río de la Plata. Pero sin duda su paso a la posteridad lo debe a la escritura delMartín Fierro, que publicó en dos partes, la primera en 1872 bajo el título El gaucho Marín Fierro y la segunda, en 1879, como La vuelta de Martín Fierro, en 1879. Murió en Buenos Aires el 21 de octubre de 1886.
ARTE, VISUALIDAD E HISTORIA
PABLO OYARZUN
PABLO OYARZUN
La
experiencia de la obra es, para el sujeto, la experiencia de un
extrañamiento –de sí– precisamente allí donde se le imponía la necesidad
del reconocimiento, y ello de manera múltiple: el reconocimiento en la
obra y en lo que ella muestra, en el propio aprehender de lo que se
muestra, el reconocimiento en el mundo a que pertenece la obra y en el
suyo propio, el reconocimiento consigo y con los otros, por ejemplo, en
el común denominador de un público. Porque, me atrevería a decir,
ninguna obra está destinada a un público, y no hay un público de la obra
de arte, así como tampoco le concierne ninguna vivencia intransferible
que alentase en la intimidad de un sujeto previamente constituido.
La
experiencia de la obra disloca al sujeto respecto de sus pequeñas y
grandes certidumbres de sentido, lo disloca en sí mismo, y esta
dislocación –que lo constituye– es un inquietante goce, anterior, entre
otras cosas, a cualquiera distinción entre lo privado y lo público.
PABLO OYARZUN ROBLES, filósofo, ensayista y traductor. Entre sus publicaciones se cuentan los libros: El Dedo de Diógenes (1996, Premio de Ensayo del Consejo Nacional del Libro y la Lectura), De lenguaje, historia y poder (1999, segunda edición 2006), Arte, visualidad e historia (2000),Anestética del ready-made (2000), La desazón de lo moderno(2001), Tentativas sobre Matta (en colaboración, 2002), El rabo del ojo. Ejercicios y conatos de crítica (2003), y Entre Celan y Heidegger (2005, Premio de Ensayo del Consejo Nacional del Libro y la Lectura), y las traducciones de losTextos Estéticos (1983) y la Crítica de la Facultad de Juzgar(1992) de Kant, La dialéctica en suspenso (1995, segunda edición ampliada 2009) de Walter Benjamin, El Meridiano(1997) de Paul Celan, el Spleen de París (2003, reeditado en 2008) de Baudelaire, Sátiras, poemas y otros escritos (2005) de Swift y El Narrador (2008) de Walter Benjamin.
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