El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, criticado por dirigentes futbolísticos y políticos, hizo oídos sordos y no contestó a los pedidos para que abandone el cargo.
La Federación Internacional de Fútbol y Asociados se encuentra en medio de un gran escándalo de corrupción, y en la víspera una elección en la que Blatter buscará un quinto mandato.
“Los eventos de ayer han dejado una gran sombre sobre el fútbol, las ligas y el Congreso. Las acciones de individuos han arruinado y traído pena y humillación al balompié, y requieren medidas y cambios por parte de todos nosotros. No podemos permitir que la reputación del fútbol y de la FIFA se arrastrado más tiempo por el barro. Eso tiene que parar aquí y ahora", afirmó el líder de la FIFA.
A pesar de las presiones para que dimita, Blatter proseguirá con la elección presidencial de este viernes, en la que es posible que sea designado para permanecer otros cuatro años más frente a la FIFA, y aseguró que mucha gente lo quiere responsabilizar a él por lo sucedido.
“Sé que mucha gente me hace responsable, en última instancia, de las acciones y reputación de la comunidad del fútbol global por la decisión sobre los anfitriones de la copa mundial o el escándalo de corrupción. Nosotros, o yo no podemos vigilar a todos, todo el tiempo. Si la gente quiere hacer algo incorrecto, también tratará de ocultarlo”, aseguró Blatter.
Se anticipa que el suizo, quien rechazó renunciar como lo había pedido la UEFA a primeras horas del jueves, gane la elección de este viernes en la que su único contrincante es el príncipe Ali bin al-Hussein de Jordania.
Luego de las más recientes y severas acusaciones en sus 17 años al mando del organismo mundial, Blatter está bajo la lupa a raíz de las investigaciones en Suiza y Estados Unidos sobre corrupción entre dirigentes del fútbol.
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